Este volumen presenta las líneas fundamentales del pensamiento de Adorno. La modernidad y la revolución científico-técnica son afrontadas desde la perspectiva de Auschwitz, que no sólo se inserta en relación con el proceso civilizador de Occidente, sino que representa una barbarie irrepresentable e incomprensible. La civilización devora sus hijos y genera tanto el antisemitismo como una industria cultural basada en el principio de intercambio mercantil de la sociedad de mercado. Pero no se trata simplemente de una crítica a un modelo de sociedad, sino de una valoración acerca de un proceso histórico de civilización, que lleva al debilitamiento progresivo del individuo, a la pérdida de autonomía cultural y al dominio de la naturaleza sobre la sociedad que se consuma en pérdida de identidad. Zamora se centra en dos obras fundamentales de Adorno, la Dialéctica de la Ilustración y la Dialéctica negativa, analizando también las relaciones de Adorno y los influjos mutuos con Walter Benjamin y M. Horkheimer. A partir de ahí esboza elementos de resistencia a la barbarie, se abre a un pensamiento no identificador desde las inevitables aporías del pensamiento reflexivo y conceptual, analiza la ambigüedad de la moral (especialmente la que deriva del idealismo kantiano y hegeliano) y postula tradiciones teológicas como la prohibición de imágenes, la visión del mundo desde la perspectiva de la redención y la teología de la historia que reivindica la suerte de los vencidos. José Antonio Zamora nos ofrece uno de los mejores estudios que hay en español sobre Adorno en particular y la Escuela de Francfort en general. Después de su excelente trabajo alemán (Krise, Kritik, Erinnerung) ofrece aquí páginas densas, con profusión de notas y un estudio concienzudo de las fuentes y la principal bibliografía secundaria en lengua alemana. Es un libro importante sobre uno de los autores más complejos e interesantes de la filosofía contemporánea.
J. A. ESTRADA.